La industria de los diamantes, ha experimentado un gran repunte en India y China.
En las últimas dos décadas, los precios de las piezas más grandes han duplicado su valor.
Con varias puertas blindadas para acceder, N.B. Parag, consejero de Karp Group, fabricante y distribuidor indio de diamantes, sostiene por primera vez un diamante de 141k. Aunque la pieza, es del tamaño de una pelota de golf es demasiado grande para un anillo, tiene el tamaño perfecto para una cartera de inversión.
Parag opina, que casi la mitad de las piedras preciosas de gran tamaño vendidas terminan en cajas fuertes de clientes millonarios, que creen que los diamantes son una inversión a largo plazo.
El mismo viajó recientemente a Gaborone, capital de Botswana, y pujó por el último lote de piedras preciosas gigantes extraídas de una mina ubicada a cientos de kms al norte de Gaborone en el desierto de Kalahari. Parag se impactó al ver la pieza, que en los siguientes días vendió por $6.1 millones.
Muchos distribuidores de diamantes viajan a este país africano, para comprar piedras preciosas de grandes medidas. Algunas de éstas, van a carteras de inversión, al igual que acciones, bonos y oro.
Durante años, piedras de pocos quilates han sido el verdadero motor de crecimiento en la industria de los diamantes, el cual ha tenido un gran repunte en países como China e India. Aunque se extraen en minas de África y Canadá y se pulen en Bélgica, Israel o India donde se fabrica joyería con los mismos.
Al igual que el oro, el valor de estas piezas “accesibles” al público, ha caído desde el máximo registrado en 2011.
Sin embargo, en los últimos 20 años los precios de las piedras de mayor tamaño se han duplicado. También, el precio de las más accesibles, las de un quilate, al parecer han aumentado un 76%, que se le adjudica al férreo control de De Beers, de muchos de los diamantes que llegan al mercado.
La compañía suiza Finanz Konzept AG, coincide con esta opinión. La firma lanzó un fondo en 2012, que se dedica a comprar diamantes y a trasladarlos a Suiza, Abu Dubai y Hong Kong, antes de venderlos a joyerías y otros inversores.
La gestora de activos Necip Babuc, explica que las inversiones llevadas a cabo por parte de inversores e instituciones, deberían hacer que el fondo supere los $50 millones el próximo año.