Cansados de que sus reclamos no sean escuchados, cerca de un millar de trabajadores de la compañía minera Antamina tienen previsto realizar hoy un plantón en el frontis del Ministerio de Trabajo, con el propósito de apelar para que no se declare ilegal la huelga indefinida que mantienen desde el pasado 10 de noviembre.

Según el secretario de defensa del Sindicato Único de Trabajadores de la Compañía Minera Antamina (Sutracomasa), Hermann Elera Celis, 1,750 trabajadores afiliados a su gremio vienen acatando esta huelga con el objetivo de que se mejore el tema de seguridad y salud en su centro de operaciones, políticas y procedimientos y por incumplimiento del convenio colectivo.
El representante de este sindicato hizo saber que la compañía minera viene tomando una actitud antisindical y desde el día siguiente de la medida de protesta les cerraron el comedor, por lo que se han visto obligados a realizar una olla común en el frontis de la mina, con apoyo de las comunidades que les hacen llegar víveres.

Elera precisó que son varios los motivos que los han obligado a que su gremio tome esta medida de fuerza por primera vez en la historia de Antamina. Uno de ellos es que están invitando al retiro a trabajadores que han tenido algún tipo de accidente laboral, en vez de reubicarlos; igualmente que este año no se les haya informado oportunamente que el pago de las utilidades, que se hizo efectivo en el mes de septiembre, se haya visto recortado en más del 50%.

“Ya hemos visto que nos están quitando muchos beneficios desde hace poco más de dos años, tiempo que tenemos por primera vez una administración peruana. Antes, cuando había una administración extranjera jamás habíamos tenido este tipo de problemas y nos sentíamos orgullosos de trabajar en Antamina”, dijo el dirigente sindical.

El sindicato de trabajadores de la minera interpondrá la acción en contra de la decisión del Ministerio de Trabajo, que declaró ilegal la medida de fuerza que acatan desde el 10 de noviembre.

"Estamos siguiendo los pasos legales. Vamos a pedir un recurso de revisión de la resolución de ilegalidad de la huelga, eso nos da dos o tres días más hasta que salga la resolución final", afirmó a Reuters el dirigente sindical Hernán Robles.

El jueves, el MTPE declaró ilegal la protesta de los trabajadores, por lo queAntamina -controlada por BHP Billiton Ltd y Glencore Xstrata- les pidió que retomen sus labores.

La minera, sin embargo, aseguró que está dispuesta a retomar el diálogo con el sindicato, pero "sin presiones ni condicionamientos".

Los trabajadores de Antamina reclaman a la empresa -la mayor productora de cobre del país- mejoras en las condiciones de trabajo y una mayor participación en las ganancias. La huelga es la primera protesta de ese tipo que se registra en Antamina.

La Dirección Regional de Trabajo ratificó la ilegalidad de la huelga convocada desde el 10 de noviembre por el Sindicato de trabajadores de Antamina (SUTRACOMASA). En ese sentido, la empresa hace una exhortación a quienes decidieron ser parte de esta medida de fuerza, acatada de manera parcial, para que se reintegren a sus labores a fin de evitar mayores afectaciones a sus ingresos (remuneraciones, gratificación de diciembre, bono de productividad, bono de asistencia perfecta, CTS, utilidades).

Como de costumbre, Antamina mantiene una actitud de puertas abiertas y de entendimiento, pero de firmeza en sus convicciones y transparencia en sus propuestas.Por eso, queremos informarles que mantenemos el ofrecimiento que hicimos previo a la huelga de otorgar un préstamo con facilidades para quienes requieran atender ciertos compromisos que pudiesen haber adquirido. A aquellos colaboradores interesados en el préstamo y que se encuentren laborando, los invitamos a que el día lunes 24 se acerquen a las oficinas de Recursos Humanos.

En Antamina, el camino siempre ha sido el diálogo constructivo y sin presiones. Esa ha sido y seguirá siendo parte de nuestra cultura. Miremos juntos al futuro con visión de desarrollo para todos.

Invitamos a los dirigentes del Sindicato a que depongan esta medida de fuerza a fin de iniciar un diálogo sin presiones ni condicionamientos, tal y como a sido siempre la política de la empresa.